No sé si es verdad o mentira o un cuento de Halloween, pero bueno, puede ocurrir porque el mundo es un sitio muy extraño habitado por gente más extraña aún. ¿Alguno de nosotros es muy aficionado a su móvil y piensa ser enterrado con él? Bueno, si esto es verdad, no eres el único tipo tan loco.
El caso es que el montenegrino Arso Banjeglav era un tío tan feliz con su móvil, haciendo llamadas y enviando mensajes de texto a todos sus amigos, que tuvo esa idea: ser enterrado con su móvil.
Así que cuando murió, su hijo Brano guardó el móvil en el cajón y lo enterraron con él… para descubrir tiempo después que el pequeño y entrometido nieto de Arso le había sacado la tarjeta SIM mientras jugaba. Habían enterrado el móvil, ¿sin alma?
Así que cuando murió, su hijo Brano guardó el móvil en el cajón y lo enterraron con él… para descubrir tiempo después que el pequeño y entrometido nieto de Arso le había sacado la tarjeta SIM mientras jugaba. Habían enterrado el móvil, ¿sin alma?
No sé qué pensaron pero, ¿ imaginas qué está pasando en estos momentos en algún lugar de Montenegro? Sí, están desenterrando al pobre y putrefacto Arso Benjeglav para devolverle la tarjeta SIM al móvil. ¡Tal vez quiera enviar SMS desde el cielo!
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